Con el transcurso de los años, el progreso innovador es innegable en muchos de los campos cotidianos. El sector del ocio no es ajeno a esta tesitura, teniendo claras referencias de estos pasos adelante en dos de sus opciones más asiduas para millones de personas: los videojuegos y la música.
Una canción, una melodía o unos acordes pueden despertar la vena sentimental del oyente, permitiéndole realizar un viaje único hacia experiencias pasadas vividas, únicamente cerrando los ojos y dejando correr su imaginación. En últimas fechas, este hecho, se ha aprovechado en aspectos como los videojuegos o el séptimo arte, ya que, algunas de sus obras de culto, tienen como distinción y como hilo conductor fácilmente identificable, a una determinada canción o una banda sonora.
El caso del sector gaming, la compenetración de sus productos con la música se ha llevado a la máxima expresión, puesto que títulos como "Uncharted", "The Last of Us" o "Silent Hill" han experimentado otra dimensión musical en sus entregas, aumentando de nivel todo el videojuego en su conjunto hacia un estado netamente superior que sino contaran con esos acordes.
Este cóctel que parece tan novedoso y que se ha llevado a la máxima expresión en la última década, tiene sus inicios en el siglo pasado. Las personas que superan la barrera de los treinta años de edad recordarán aquellos míticos arcades que irrumpieron en sus vidas, para ofrecerlos una nueva forma de pasar sus ratos de asueto, a los mandos de una consola o una máquina recreativa.
En aquellos momentos, la parcela gráfica de estas creaciones comparada con la de las actuales se encuentra a años luz. Eso sí, como en cualquier comienzo, se sentaron las bases del futuro desarrollo que han permitido las innovaciones tecnológicas del mercado. Hecho que sucedió de la misma manera con las bandas sonoras de cada arcade. Actualmente, obras como "Mario Bros" o "Street Figther", aun en nuestros días, siguen siendo referencia para millones de personas, y cuentan con aquellos acordes primitivos que permitieron a millones de personas identificar su arcade idolatrado. Aquellas "bandas sonoras" no tienen comparación con las grandes composiciones musicales actuales que conforman un videojuego, pero lo cierto es que esa moda "vintage" sigue más presente que nunca. Prueba de ello es que no paran de llegar al mercado nuevas versiones de estos afamados arcades, y siguen contando con esos acordes míticos.
Estos éxitos tampoco se han pasado por alto para una de las opciones de ocio con mayor progresión del nuevo siglo: las nuevas máquinas tragamonedas. Con este tipo de productos, sucedió lo mismo que con los videojuegos. La esencia de esas tragaperras de tres carretes y manivela presentes en los bares de todo el mundo sigue presente en estos nuevos slots interactivos que se basan en temáticas variadas para conseguir consagrarse como éxitos. Los videojuegos, como no podía ser de otra manera, son opciones en las que se basan estos nuevos productos de las plataformas de juego, haciendo que sus grafismos y música estén presentes más allá del producto arcade en cuestión.
